domingo, 13 de enero de 2013

QUE MAL AMIGO............





Cogiste el tren del olvido
y me dejaste esperando
en el andén de la estación.


Con la maleta cargada de inolvidables recuerdos:
adolescencia y juventud.
Días que pasaron sin noticias
que volaron como pájaros sin nido.






Llevaba las manos repletas de amistad,
y me las arrebataste
cual corazón roto por el paso de los años.










¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Que mal amigo ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

TU ROSTRO HELADO















Fui corriendo a tu encuentro,
pero tu rostro no decía nada,
aunque tu alma transmitía
recelo y caprichos de niño mimado...................


Me pare de pronto¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

y observé tu cuerpo helado, 
sin consuelo, como figura de cera.
Frío y muerto.





DE TUS LAGRIMAS







El mar me trajo el aroma salado de tus lágrimas
perlas que resbalan por tus mejillas rosadas 
Aroma de agua salada como quejidos que espantan
Música de celestial melodía para empaparme todos los días.





sábado, 12 de enero de 2013

MIRE TUS OJOS TRISTES







Miré tus ojos tristes 
como la noche sin estrellas,
Con tu boca entreabierta sin decir palabras,
pues tu garganta calla.
Sonidos que no salen, pues no se les escucha.
Negra noche de madrugada helada.
De estrellas sin cielo o de cielo sin estrellas.
De madrugada callada como tu boca que no habla.



HUELLAS

Desde el balcón de los sueños rotos, 
con costuras de piel erizada.
Pasos que dejan huellas, 
ánimas de velos blancos,
con transparencias cansadas. 
Huellas imborrables
de amaneceres incansables.
Espadas con sangre derramada, 
hogueras que no calientan
con maderas de torturas.


ESPESA NIEBLA

Por entre la maraña de la espesa niebla
te veo a lo lejos con suaves gestos de niño viejo
Como músico que se tambalea en cuerda floja 
de agonizante amargura
 violinista que atrapa notas de música 
que llevan poemas de amor
 marchitandose con el paso de los cansinos días, meses y sus años.




jueves, 10 de enero de 2013

LOBOS ENTRE LA MANADA






Luz en la noche de estrellas que no emiten
Madrugadas negras sin tu mirada
Lobos que se encerraron entre la manada
Rosas con perfume de empalagosos aires 
que te embriagan hasta las entrañas
Aromas de dolor que se clavan en mi piel
Cuentos de lo que hicimos y no pudo ser